Vicente Martín entra a una nueva escuela. Esto no es nuevo para él, ya que ha cambiado de escuela en muchísimas ocasiones a causa del trabajo de su madre. Pero esta vez es distinta; todos sus compañeros son muy buenos, aplicados y trabajadores. Y a Vicente no le gusta mucho esta actitud. Además, la señorita lo sienta al lado de Javier Pastor, el chico que peor escribe del mundo. Sin embargo, Vicente empieza, casi sin darse cuenta, a ayudar a su compañero a escribir mejor. Así, se va acostumbrando a la nueva escuela y a su nuevo amigo. Javi será malísimo escribiendo pero hace unas maquetas increíbles. Vicente lo alienta a escribir su proyecto “Cómo... escribir realmente mal” para la presentación anual en la que se dan premios a ciertos trabajos. Por fin llega el día y como Vicente sabe que Javi no va a ganar nada, lleva todas las maquetas de su amigo a la escuela, hace un cambio en la lista de categorías para la elección de ganadores de premios.
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